Estas imágenes fueron captadas a lo largo de una semana por una cámara de vigilancia de un museo de Manchester, Inglaterra. Una estatua de 4 mil años fue flagrada girando gradualmente en torno a su propio eje.
Protegida del público por una pared de vidrio, la reliquia fue retirada de la tumba de una momia y representa un hombre identificado con Neb-Senu. La estatua habría sido hecha como una ofrenda al dios Osiris.
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